miércoles, septiembre 16, 2009

Meoliberalismo o neoliberalismo, he aquí el dilema, que será preferible me pregunto.


La Derecha comenzó a girar sus cañones apuntando ahora hacia el intocable y regalón Marco Enríquez-Ominami. Hoy se comienza a escarbar en archivos de 10 años de existencia donde el ahora amenazante candidato decía a una revista, que para él ser ciudadano chileno constituía una verdadera tragedia. Así se dijo ayer a la prensa, la propia hermana de Sebastián Piñera lo afirmaba. Este hecho marca el inicio del giro de la campaña derechista, que considera prioritariamente el escenario de enfrentarse en segunda vuelta con M.E.O.

No es la primera vez que cambia de un día para otro el escenario durante el tiempo que dura la larga campaña del abanderado derechista que en todas las encuestas se da como ganador relativo de las próximas elecciones de diciembre.

Primero fue Lagos, de modo que la incontrarrestable artillería descargada sobre su figura evitó que llegara siquiera a ser el candidato oponente. El “dossier” del ex-presidente en manos de la Derecha era una bomba de tiempo, defender su obra, transantiago y ferrocarriles de por medio, era una tarea perdida.

Después pasó Frei mediante una primaria de tongo. La tarea fue fácil, los errores principalmente de la cúpula socialista, que impuso a Frei y maltrató a sus militantes disconformes, fue el medio propicio para potenciar la gravedad existente. Meo contó con una amplia cobertura en diarios, radio y TV; que finalmente terminó por herir de muerte a la Concertación y por consiguiente a su candidato.

La Derecha consideró que la posibilidad de que Frei llegara tercero constituía el desplome de la Concertación , entonces el camino estaba allanado, vencer a un novato en el ballottage, era solamente un trámite. Se mataba a 2 pájaros de 1 sólo tiro.

Si embargo, aunque a la lógica la contradiga la verdad mentirosa de las encuestas, es evidente que existe un mayor número de votos intransferibles desde MEO a Frei, que desde Frei a MEO, en consecuencia, Marco Enríquez es el peor escenario para la Derecha en una segunda vuelta.

Enríquez no tiene el aparato político ni la ascendencia probada en 20 años que sí tiene la Concertación de convencer a su electorado en el trance de ser derrotado, de traspasarle sus votos al que pasó a la segunda etapa. Los votos de la Concertación no han sido robados a la Derecha , en cambio MEO ha logrado encantar a muchos electores de ese sector que estaban seguros, que eran del patrimonio exclusivo de la Derecha. De manera que todos los votos de la Concertación irán a Enríquez de derrotar este a Frei, aquí solamente se suma, nunca se resta.

¿ Y cual es la diferencia definitiva entre los candidatos?

Hernán Somerville, cabeza visible de la asociación de banqueros, ha dicho recientemente que cualquiera de los candidatos – con posibilidades ciertas de ser elegidos, es decir solamente tres- no amenaza la existencia del modelo (neoliberal). De manera que al parecer da lo mismo o casi lo mismo.

Sólo me atrevo a hacer una tímida diferenciación:

i) Piñera y su sector, hacen apología de la mano firme, tienen el padrón del autoritarismo. El neoliberalismo será reproducido y mantenido mediante el uso de la fuerza “que les permita la ley”. Y la ley sabemos bien permite mucho. La represión que hemos conocido en estos 20 años de la Concertación , de ser elegido el candidato de la Derecha , y no hay que ser brujo para afirmarlo, se multiplicará.

ii) La aplicación del neoliberalismo como modelo económico, “es obra” de la Concertación. Los conflictos que han surgido, o que surgirán de ser esta elegida, - por las consecuencias nefastas que ha tenido para la clase trabajadora, el medio ambiente, y la población originaria- serán manejadas de la forma que conocemos y que ellos llaman “gestión de conflictos” en que ellos dicen tener “ventajas comparativas” respecto a la Derecha.

iii) El meoliberalismo de MEO está por verse, pero es neoliberalismo al fin. Yo hasta el momento sólo encuentro 2 puntos positivos: Uno es que se acabaría la Concertación tal como la hemos conocido hasta el momento, se desarmaría la máquina del poder por el poder, dejaría de existir una “mafia” poderosa, puesto que sus hombres claves no tendrían cabida en un futuro gobierno de Enríquez, que de aceptarlos lo coparían ahogándolo en muy poco tiempo. El otro punto es que es el mejor candidato para derrotar a la Derecha , y con seguridad lo derrotará si le dan la oportunidad, se producirá un entusiasmo y ansiedad inusitados, los electores tendrán la sensación que de verdad se producirá un cambio.

Atte. René Dintrans

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