martes, octubre 13, 2009

Estoy pensando en las municipales de octubre de 2012

Para mí sería muy fácil decir que lo óptimo es votar ahora por Enríquez para facilitar el dilema Enríquez- Ominami versus Piñera en la segunda vuelta. Sin embargo, me van a permitir la sinceridad de manifestar lo que le conviene al pueblo en el próximo estelar de diciembre, al pueblo consciente me refiero, al que se ha alineado siempre en la Izquierda : Arrate es el hombre, Arrate es la voz del pueblo, Arrate es la voz de Allende, Arrate es la voz de la unidad.



Necesito escuchar en voz alta: Arrate.


Necesito escuchar su nombre por lo menos 7 u 8 veces cuando contemos los votos válidamente emitidos en la mesa que me asigne como apoderado el Juntos Podemos. El pueblo necesita que Arrate se perfile con notoriedad en las próximas elecciones, necesita que Arrate le exija a Frei o Enríquez con sus votos en la mano las garantías correspondientes para entregárselos en la segunda vuelta, garantías que consisten en preservar los intereses del pueblo, entre los cuales figura necesariamente la preservación del medio ambiente, la preservación del medio vital para seguir existiendo como pueblo chileno, y también como pueblo mapuche. Las garantías suficiente para preservar los recursos naturales y para recuperar aquellos – como el agua- que insensatamente se han enajenado en favor de las multinacionales.



Cualquiera sea el resultado, la Izquierda debe buscar el camino de la unidad que tan difícil ha sido en esta elección perdida. La próxima oportunidad de medir fuerzas será en octubre de 2012. Para tal efecto, con suerte habrá inscripción automática y votación voluntaria.



Ni se piense que para entonces se habrá abolido el antidemocrático sistema de elección binominal, la Derecha elegirá 60 de 120 diputados, y 18 de 36 senadores en disputa, el lector informado sabrá asumir lo que esto significa.



Afortunadamente en las elecciones municipales no corre el binominal, de modo que el objetivo será reunificar a la Izquierda para entonces, de manera de poder estructurar una potente lista que elija alcaldes y un número relevante de concejales.



La nueva Unidad Popular o como se llame, deberá incluir en su lista a candidatos de las fuerzas sociales e indígenas, deberá incluirlos como sea, en sus cupos, o en el cupo de independientes por el pacto.



La Izquierda no debe entretenerse en quién administrará el Estado en los próximos 4 años, lo cierto es que esto no tiene mucha importancia.



Su ocupación prioritaria será la construcción de la unidad, y en crear la capacidad de responder a las políticas que se llevarán a cabo desde el corazón del Estado. La Izquierda deberá alinearse con los trabajadores y con todas las otras víctimas del sistema neo-liberal que seguirá siendo impulsado por quién se siente en el sillón de O’Higgins.



Los barrios humillados de los pobres y las comunidades agrícolas de los mapuches seguirán siendo acosados. Los profesores seguirán siendo pisoteados y los pescadores artesanales seguirán siendo diezmados por las leyes de pesca que se votarán en el Parlamento. Las minorías de todo tipo que no tienen representación en este sistema político que se auto-designa democrático seguirán siendo ignoradas.


El azar en cierto modo, quizo que Arrate tuviera la misión de encabezar este proceso de unidad, quizo que se abrieran ventanas en los medios de comunicación para imponer su palabra, la palabra del pueblo. Palabra que emitida por él, le ha dado una autoridad indiscutible para continuar el camino que la fuerza y la traición interrumpió a Allende.


La Izquierda tiene mucha pega por delante.



Atte. René Dintrans

No hay comentarios: